viernes, 13 de mayo de 2011

Sol... ¿Sonríe?


¡Chocaron las notas! ¡Do ha atropellado a Sol! ¿Qué hacemos? La llora por no saber qué ha pasado, Mi se siente culpable y Re le consuela. Fa está al lado de Si… ¡Todos están atónitos!

El arte se ve comprometido por tan grave accidente, la poesía llora desconsoladamente… Corre peligro el destino de la vida. “-¡Sol!, ¡Sol!” grita Do… No sabe qué hacer. ¡Llora por la culpa! ¡Desea morir! Todos están a la espera de un fatal veredicto… Entonces aparece Música, al parecer tiene una seria conversación con Arte y Poesía; llegaron a una conclusión: sanar a Sol. Do llora de felicidad y besa a Sol, le dice cuánto lo siente. Re, Mi, Fa y Si corren para abrazar a Sol… Todo ha pasado, todo ha vuelto a la normalidad.

Algunas noches Sol se vuelve al cielo y comienza a llorar… Desde ese momento, dejó de ser el mismo. Le duele que nadie lo note y solo se limita sonreír. Así pasa el tiempo y se vuelve natural en él, ya nadie volvió a diferenciar si sonreía o lloraba tras su sonrisa.